Breaking Bad, capítulo final. Una vez más, Lydia endulza su té de manzanilla con stevia. Será la última: Walter ha adulterado con ricina, veneno letal, el contenido del sobre que ella vierte dentro de la taza (“esa mierda de stevia que siempre ponés en tu té”, Walt dixit).
“Perdón, Stevia”, bromeará después la actriz en una entrevista, como si aquel el desenlace tóxico hubiera ensuciado la imagen del producto. Parece más bien lo contrario: su inesperado cameo en “la” gran serie yanqui contemporánea no hace más que reflejar la consagración de la stevia como ícono gastronómico de nuestro tiempo. Y viralizar la difusión global del extracto de este «milagroso» arbusto paraguayo..
Pero, ¿es realmente natural, segura y saludable la stevia que consumimos? ¿Cómo llega un arbusto verde a transformarse en polvito blanco? Las respuestas a estos y otros interrogantes sobre la nueva estrella de un segmento que hace tiempo abandonó el rótulo genérico de “sacarina”, en esta nota publicada en la última edición de revista JOY.
Hola, soy un chef y pastelero que hago productos de pasteleria totalmente caseros, sin conservantes y sabrosos, como los de la Abuela!!!
quiero saber cómo hago para participar como expositor y promocionar mis pasteles. Saludos, Iván.